¿Sonámbulo?
Más de 60 por ciento de niños con padres sonámbulos desarrolla este trastorno, revela un estudio canadiense.
“Cuando ambos padres han sido sonámbulos, pueden esperar que sus hijos sean sonámbulos y por lo tanto deben prepararse de manera adecuada”, explica en el informe Jacques Montplaisir, investigador del Hospital Sacre-Coeur de Montreal.
El sonambulismo a menudo comienza en la infancia y generalmente desaparece en la adolescencia, pero puede continuar hasta la adultez.
Para el estudio se analizaron a más de 2000 niños y 47 por ciento de quienes tuvieron un padre sonámbulo se convirtió en sonámbulo. Y si ambos padres los eran, las probabilidades de que el hijo desarrollará sonambulismo fueron de casi 62 por ciento.
No todos los sonámbulos se levantan de la cama y se ponen a andar. Algunos se limitan a sentarse o incorporarse en la cama o actúan como si estuvieran despiertos.
Los investigadores indican que lo más importante es que los papás eviten que sus hijos se lesionen, retirando los objetos peligrosos de las áreas a las que pueden llegar.
Se deben mantener las puertas y ventanas cerradas con llave para que la persona sonámbula no pueda salir a deambular.
Cuando se encuentra al miembro de su familia en un episodio de sonambulismo, se le debe guiar cuidadosamente de regreso a la cama. No se le debe gritar ni hacer ruidos fuertes, ni sacudirlo ni despertarlo.