Crece el número de garitas al igual que las quejas por la espera

Hay buenas noticias en las garitas de entrada de San Ysidro, el cruce fronterizo más transitado en el hemisferio occidental: después de años disminuyendo, más personas están cruzando ahora entre Tijuana y San Diego. Pero hay malas noticias también: muchos conductores reportan que sus tiempos de espera, han estado subiendo otra vez desde la apertura de las nuevas cabinas de inspección hace casi un año, las cuales habían hecho caer dramáticamente los tiempos de espera.

Con la información de que más mexicanos están cruzando para ir de compras a San Diego, y que un mayor número de turistas de Estados Unidos han estado vacacionando en Baja California, el alza en los cruces de vehículos no debería ser ninguna sorpresa. Sin embargo, el aumento del tráfico ha acarreado nuevas quejas por el aumento en los tiempos de espera.

“Si es en la mañana, te apuesto a que tardas dos horas”, dijo Carolina Rodríguez de 36 años de edad, madre de familia de cuatro, que cruza varias mañanas a la semana, desde su casa en Tijuana a su trabajo limpiando aviones en Lindbergh Field.

Pete Flores, quien dirige la oficina de campo de la Aduana y Protección Fronteriza de San Diego, dijo que el tráfico de pasajeros ha aumentado en todos los puertos de entrada en su jurisdicción, y San Ysidro muestra los mayores incrementos. El tráfico de vehículos ha subido un 26 por ciento en los primeros nueve meses del año fiscal – de octubre a junio- en comparación con el mismo periodo del año pasado, dijo Flores.

El aumento de los números ha sido especialmente marcado en los carriles generales de tráfico para los conductores que no están ni en el programa de usuarios previamente autorizados de Sentri, ni los que pueden usar el Ready Lane y que cuentan con tarjetas RFID, como la tarjeta pasaporte estadounidense.

Un ejemplo de ello: la Patrulla Fronteriza de California o CBP contó 420 428 vehículos que cruzaron a través de los carriles generales del puerto los días de entre semana en abril, frente a 245 331 en abril de 2014, un aumento del 71 por ciento.

El tráfico general “nos toma más tiempo para procesarlo”, dijo Flores. Los grandes aumentos han provocado el desplazamiento de mano de obra, y como resultado, “hemos tenido algunos tiempos de espera adicionales en Sentri y Ready durante los últimos meses, debido al esfuerzo por intentar bajar el tiempo de espera para los carriles generales de tráfico”.

El objetivo de la CBP es conseguir que los usuarios Sentri crucen en menos de 15 minutos, dijo Flores. El objetivo de la agencia para los usuarios Ready Lane es bajar los tiempos de espera a la mitad que en los carriles generales. Los tiempos de espera fronteriza han sido durante mucho tiempo un problema. Un estudio realizado por la Asociación de gobiernos de San Diego, encontró que la infraestructura inadecuada en la frontera San Diego-Baja California, costó a las economías estadounidense y mexicana 7.2 mil millones de dólares en producción y 62 000 puestos de trabajo en el 2007.

La ampliación del puerto de entrada de San Ysidro que se encuentra actualmente en curso, -un proyecto de 741 millones de dólares- ha elevado las expectativas de reducción de los tiempos de espera, tanto para vehículos como para peatones.

En septiembre pasado, los tiempos de espera para todas las categorías de vehículos se desplomaron tras la finalización de una fase que expandió hacia el norte la capacidad de inspección a 25 carriles, la mayoría de ellos de dobles cabinas para un total de 46 entradas. Cifras de la CBP que comparan datos mes a mes de abril a julio, muestran que los tiempos de espera se han reducido en todas las categorías de vehículos desde 2014.

Pero mientras que los cruces de vehículos son fáciles de contar, medir el tiempo de espera es más complicado.

“Es difícil juzgar cuánto se ha mejorado el tiempo de espera porque ningún cruce de frontera entre California y México tiene ningún tipo de tecnología que mida demoras hacia el norte”, dijo Kenn Morris, presidente del Grupo Crossborder, que ha realizado encuestas de cruce en la frontera.

La CBP lanzó el año pasado una aplicación de teléfono inteligente que proporciona tiempos de espera estimados, pero los usuarios se quejaron de que no es un indicador fiable. “La aplicación por desgracia no ha reflejado los tiempos de espera exactos”, dijo Paola Ávila, vicepresidente de asuntos de negocios internacionales para la Cámara de Comercio Regional San Diego. “Necesitamos tener algún mecanismo de información confiable para decirle a la gente cuándo puede cruzar”.

La incertidumbre es un problema persistente, dijo Oscar Escobedo, secretario de Turismo de Baja California. “Si usted sabe que siempre va a ser una hora, entonces usted puede administrar su tiempo”, dijo.

Una mañana reciente, Carolina Rodríguez, una ciudadana estadounidense que vive en Tijuana para ahorrar costos, se metió al carril de Ready Lane a las 5:33 a.m. y cruzó la frontera a las 7:27 a.m. Ella es uno de los más de 30 000 miembros de Cómo está la línea Tijuana, un grupo de Facebook cuyos miembros publican regularmente su progreso.

Otro miembro, Joel Daza, un residente de Tijuana que trabaja como contable en Otay Mesa, en esa misma mañana informó un cruce sorprendentemente rápido en los carriles generales, alrededor de media hora.

“Hoy, ha sido la vez más rápida que he tenido”, dijo Daza. “Por lo general, me lleva de 50 minutos a una hora y media”.

Los que cruzan frecuentemente como Rodríguez y Daza dicen que a menudo ven la segunda cabina sin oficial, incluso en momentos de tráfico pesado por la mañana.

“Hicimos de buena fe esta inversión en el puerto de entrada, así que ¿por qué no se están utilizando todas las herramientas?”, Preguntó Jason Wells, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de San Ysidro, cuyos miembros dependen en gran medida de los clientes de México. “Podemos soportar la recesión, la devaluación, pero cuando los tiempos de espera suben, nos matan”.

El oficial de la CBP, Flores dijo que tener la segunda cabina operando incrementa la eficiencia solo de 30 a 40 por ciento.

“Preferimos operar con una sola cabina”, dijo Flores. “En la gestión de nuestros tiempos de espera, hay una serie de opciones que implementamos para garantizar la seguridad y facilitar el proceso, dijo. “La apertura de casetas dobles es una de esas opciones que depende de los recursos disponibles en el momento”.