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Para jugar a inventar como Leonardo Da Vinci

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La exhibición The Inventions of Leonardo Da Vinci estará abierta al público hasta el 18 de octubre en el Western Science Center de la ciudad de Hemet y contará con reproducciones de los diseños y modelos construidos por el innovador artista renacentista.

La muestra, incluida en el precio de entrada al museo, es una invitación a pensar como Leonardo Da Vinci, quien por las mismas fechas a finales del siglo 15 en que Cristóbal Colón llegaba a América en barcos de vela, ya realizaba observaciones acerca del modo en que volaban los pájaros.

¿Por qué estudiaba Da Vinci la proporción de las alas o la velocidad que toma una turbina en girar y cuánta energía requiere para hacerlo? La respuesta a esa pregunta podría estar en el avión que diseñó el artista, mismo que cuelga de uno de los techos del museo.

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Durante la presentación que se escucha durante la visita a la exhibición se cuenta que Da Vinci solicitó a los mecenas de su tiempo la posibilidad de recibir apoyo para diseñar inventos o pintar, los cuales eran sus dos grandes talentos.

Pero ésta es una exhibición diferente donde además de las piezas armadas con base en los inventos de Da Vinci, el visitante encuentra mesas, lápices, papel, cintas métricas y espejos, algunas de las sencillas herramientas similares a las que usó Leonardo Da Vinci en su propio estudio de trabajo.

Esta exhibición tiene por objetivo conseguir que los asistentes ejerciten el pensamiento científico mediante la observació n de las muestras a escala de los inventos de Da Vinci.

Entre los inventos a la vista están una turbina hidráulica, un motor de propulsión manual y una prensa muy parecida a la inventada por Gutemberg.

Repartidos entre los objetos y las estaciones de trabajo hay mensajes en los que las letras aparecen al revés o mezcladas con juegos de palabras, lo que mantiene al público completamente activo y sorprendido, así se trate de niños o de adultos

Otra estación o mesa de trabajo presenta una reproducción de tamaño natural de El hombre de Vitruvio. Ahí, hay cintas de medir y fotografías con datos acerca de las proporciones del rostro humano, como que miden aproximadamente lo mismo la nariz que la oreja o que la cara está dividida en tres partes similares que van del mentón al extremo inferior de la nariz, de ahí al punto más alto de una ceja y de la ceja a la línea donde nace el pelo.

El corroborar estas medidas del cuerpo humano, llevaron a Da Vinci a interesarse en él como en la máquina perfecta, algo que le inspiró su conocimiento de la obra del arquitecto romano Marcus Vitruvius Pollio en quien Da Vinci se inspiró, para dibujar el que se conoce hoy como el Hombre Vitruviano o el hombre de Vitruvio.

El hombre Vitruviano, es una de las imágenes más conocidas de Da Vinci, además de la Mona Lisa. El dibujo original del hombre Vitruviano es un bosquejo realizado en tinta en el que Da Vinci incluyó muchísima información relacionada con el cuerpo, sugiriendo que con sus brazos y piernas extendidas el ser humano puede dar forma a un círculo y que el centro de ese círculo es el ombligo.

Acertijos e inventos

En otra estación los visitantes sentirán la obsesión de Leonardo por medir y tratar de entender el funcionamiento de la naturaleza, lo que lo llevó también a fabricar medidores de la distancia, del viento y de la lluvia.

Niños y grandes pueden seguir la exhibición mediante un folleto impreso que ayuda a entender los acertijos de Da Vinci, mismos que él colocaba en sus obras para retar a quienes se acercaban a ellas.

Leonardo, según sugiere la exhibición al citar sus palabras más conocidas, centró toda su vida en un principio clave: el placer más noble es el júbilo de comprender.

Y probablemente la estación más divertida sea la de los inventores, donde obtendrá una hoja y un lápiz y la oportunidad de diseñar su propio proyecto. “Todos los días recogemos los inventos de esa jornada”, comentó la voluntaria que asistía a los niños a entender el experimento de diseñar y explicar algún aparato propio.

Los inventores dejan sus creaciones colgadas en los tendederos puestos con ese propósito. Elaborados o sencillos, entre los inventos del día queda claro que todos están llevados por la curiosidad y el esfuerzo por transformar las cosas.

Y no faltó la lectura al revés, posible gracias a los espejos, repartidos en algunos puntos del museo, para permitir leer los misteriosos textos de Leonardo Da Vinci o para encontrar las claves de los tres acertijos y las doce preguntas que los visitantes tienen que resolver en su folleto explicativo.

El Western Science Center abre de 10 a.m. a 5 p.m. de martes a domingo. La entrada general tiene un costo de 8 dólares pero hay descuentos para adultos mayores, niños y estudiantes. Personal del ejército y niños menores de 4 años entran gratis. El centro se encuentra ubicado en 2345 Searl Pkwy, Hemet, CA 92543. Para más información, puede llamar al teléfono (951) 791-0033 o visitar la página web

westerncentermuseum.org

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