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Columna: ¿Cuál es tu seguro de salud?

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¿Estás buscando un seguro de salud? Muchos deben estar pensando en este tema en California, pues la reforma de salud de losEstados Unidos ha excluido por lo menos a 3 millones de mexicanos indocumentados. ¿No sería bueno, entonces, que se pudiera encontrar un plan que esté al alcance de todos, y que no solamente traiga consuelo y esperanza, sino que definitivamente sane y sea preventivo?

Creo que eso es posible para todos, así como es posible para mí.

Yo cuido de mi salud desde que tenía doce años, pero de una manera no convencional. He aprendido que puedo utilizar un método espiritual que actúa de forma preventiva y también sanadora. Por ejemplo, a los 11 años me llevaron al médico por una alergia, pero al examinarme y hacerme unas preguntas, el médico se dio cuenta de que no era nada serio, y no me recetó ninguna medicina. Pero al examinar mi corazón, dijo que tenía un soplo, y que probablemente aumentaría con los años y me impediría realizar actividades físicas en la escuela.

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Al año siguiente, empecé a mirar la vida y la salud de una manera diferente, no como algo material, que depende del cuerpo, sino como el estado natural y espiritual del ser creado por la Mente divina, que lo gobierna todo y a todos, en perfecta armonía.

A los 18 años, cuando por exigencia de la universidad tuve que hacerme un chequeo, le pregunté al médico cómo estaba mi corazón y si tenía un soplo. “No, tu corazón está perfecto”, me contestó él.

La espiritualidad que he desarrollado a lo largo de los años y la comprensión que he alcanzado de que el cristianismo es un método científico de curación, me ha capacitado para probar su eficacia, tanto en mi propia vida como en la vida de otras personas.

Tengo buena salud, pero si me pasa algo, opto por un tratamiento metafísico teológico, como lo explica Mary Baker Eddy, teóloga cristiana y pensadora estadounidense.

Elige lo mejor para tu salud mental, física y emocional, tanto para ti como para tu familia. Comienza a vivir sin estrés, con un mayor equilibrio en tus diversas actividades, y encuentra tiempo para desarrollar tu espiritualidad y confianza en el poder divino que trae una paz y armonía inefables, y una salud segura.

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