Del ‘atelier’ a la calle
El ojo de la moda masculina está puesto en Florencia, a través de una de las ferias más influyentes: Pitti Uomo, plataforma que le da luz verde a las pasarelas internacionales.
La tendencia se vive desde las calles, donde se incuba el estilo del hombre del mañana. Participaron 1090 expositores, más de 75 marcas femeninas, 40 por ciento de presencia de expositores internacionales y compradores, y cerca de 2000 periodistas asisten para un primer contacto con cada temporada.
El pabellón central es el corazón de la feria y en donde se aprecia el estilo clásico del caballero actual, pero se exhiben también firmas juveniles; un alerón dedicado a las prendas artesanales (Make) y otro para la ropa deportiva (Play), entre otros; además se encuentra el espacio dedicado al país invitado de esta edición 86, Corea del Sur.
“Es una referencia industrial en el mundo, la única que funciona de esta manera en un mismo espacio, va de lo artesanal a lo deportivo, de lo clásico contemporáneo a los nuevos talentos; tiene una riqueza en la oferta cualitativa que la distingue”, mencionó en entrevista Rafaello Napoleone, CEO de Pitti.
“El éxito de que la calidad en la moda italiana prevalezca por más de 500 años, considero que ha estado en la formación de los jóvenes, en saber adaptar las nuevas tecnologías, en crear una identidad y no homologar”.
Compradores y fashionistas de cada rincón del planeta echan una mirada a lo hecho en Italia, etiqueta que cobra cada vez más fuerza y que los empresarios del sector quieren defender a capa y espada sobre el “Made in Europe”.
“Es una distinción que viene de nuestra historia, de buscar la excelencia, que no es solo de los diseñadores y creadores; viene desde los productores y trabajadores”, comentó Claudio Marenzi, presidente del Sistema Moda Italia.
“Tenemos una capacidad de buscar soluciones que otros no hacen, es una característica meramente italiana, respiramos el arte y la moda en nuestras ciudades”.
El himno al Made in Italy lo entonó Andrea Bocelli durante el acto inaugural en la nueva Opera de Firenze, donde se celebran también los 60 años de esta ciudad como centro de la moda.
En el concierto, el tenor estuvo acompañado de la Cameristi del Maggio Musicale Fiorentino y de la soprano Patrizia Orciani, seguido de un espectáculo de iluminación en el famoso Ponte Vecchio al pie del río Arno.
Emilio Pucci tuvo el honor de brindar un homenaje a esta metrópoli vistiendo el Baptisterio de la Plaza San Giovanni con la instalación artística “Monumental Pucci” para llegar a un público mucho más amplio y envolver toda la cuidad en el fashion.
¿Qué se verá en el 2015? La pregunta se responde en este encuentro global. Prendas cómodas y vanguardistas, estampados geométricos, florales, abrigos de nailon, bermudas amplias, y, principalmente, una combinación de propuestas que apuestan más a lo juvenil y al estilo de vida contemporáneo.
La fusión de lo sport con la sastrería clásica del hombre italiano es la nueva esencia de marcas como Z Zegna. Con acento artístico Los museos se sumaron a esta cita. Como un tributo a Florencia, el artista Francesco Vezzoli inauguró una muestra en tres casas antiguas que pertenecieron a familias de la nobleza y que ahora son los museos Bardini, di Casa Martelli y Bellini, donde infiltró sus piezas, creando un ambiente de contraste y convivencia entre las obras.
En tanto, el Museo Ferragamo presentó la exposición Equilibrium, en la cual fue explotado el tema del equilibrio desde distintas expresiones, como la pintura, la escultura, el cine, la foto, el video, las impresiones y, por supuesto, las creaciones de Salvatore Ferragamo desde hace aproximadamente seis décadas.