Audi R8: nueva materia
La nueva generación del superdeportivo de la casa de Ingolstadt ha dado un paso evolutivo importante. Desde su lanzamiento, el Audi R8 había logrado crear pasiones, gracias a su diseño y prestaciones.
Ahora, la firma decidió actualizarlo en el amplio sentido de la palabra, con un diseño que mantuviera la esencia a la vez que incorporara el nuevo lenguaje de diseño. La premisa ha sido lograda, mejorando sustancialmente al deportivo.
La aplicación de nuevas tecnologías en la construcción del vehículo, es un paso trascendental para obtener mejoras en rendimiento. Gracias al uso de fibra de carbono reforzada con polímeros, estructura que se une al aluminio, un trabajo fundamental en la mejora del R8.
Es importante recordar que para mejorar autos de esta categoría, uno de los puntos importantes es la reducción del peso, una labor en la que el desarrollo de ingeniería y la aplicación de nuevos materiales son fundamentales. Audi R8 ha logrado reducir su peso en un 15 por ciento respecto a la generación anterior.
A su vez, también se ha logrado un incremento en la rigidez del 40 por ciento, otro paso importante para mejorar el desempeño de un vehículo, sobre todo tratándose de un deportivo.
La parrilla forma parte de la nueva identidad de marca, la cual ahora le proporciona una imagen más agresiva, a la vez que el diseño se ha estilizado en los laterales.
Los faros, forman parte de la innovación del vehículo, ya que cuenta con faros frontales en LED en tanto que de manera opcional se integran los faros láser, una tecnología que llama la atención sobre todo por las ventajas que ofrece al
Audi R8 tiene una longitud de 4.42 metros de largo, altura de 1.24 metros y anchura de 1.94 metros, con una distancia entre ejes de 2.65 metros.
El interior también fue diseñado centrado en la concepción de que al tratarse de un vehículo deportivo, los controles deben enfocarse al conductor. Tenemos un nuevo diseño de volante, el cual es complementado por los controles al más puro estilo de un vehículo de carreras.
La pantalla TFT de 12.3 pulgadas, que forma parte de la instrumentación, ha sido un enorme acierto de la firma alemana, el cual ya ha sido apreciado en el TT.
El funcionamiento del sistema es intuitivo y rápidamente nos adaptamos a él, por lo que podemos configurar al estilo propio la información que se recibe, para los entusiastas, el velocímetro y revoluciones son las opciones adecuadas. De igual manera, la navegación se percibe impresionante, gracias a la nitidez de la pantalla y a la calidad de la resolución.
La consola central se conforma por un sistema multimedia, el cual deja un diseño limpio y sin complejidad.
El corazón del Audi R8 es un propulsor atmosférico V10 de 5.2 litros FSI, el cual desarrolla una potencia de 540 caballos de potencia y un torque de 398.3 libras-pie a las 6500 revoluciones por minuto.
Por su parte, la versión V10 Plus monta el mismo motor pero llevado al extremo, el cual otorga 610 caballos de potencia y 413 libras-pie de torque.
Ambas motorizaciones cuentan con una caja de cambios S tronic de siete velocidades, con un modo manual. Audi ha incorporado nuevas tecnologías como el “cylinder on demand”, el cual desconecta algunos cilindros para mantener la eficiencia en consumo cuando circula a velocidad constante.
De igual manera se ha incorporado la posibilidad de conducción “a vela”, priorizando un menor consumo de combustible.
En lo que se refiere al diseño exterior, destaca la limpieza de las formas, con líneas más estilizadas; en buena medida, este diseño se logró con el cambio del emblemático lateral del R8, el cual ahora se ha integrado a las líneas de la carrocería y se ha dividido en dos piezas.
La imagen frontal se muestra más agresiva con la enorme parrilla frontal, la cual es complementada por los faros que se muestran más afilados y un diseño limpio en el cofre.
De serie monta neumáticos de 19 pulgadas, con medidas 245/35 en el eje delantero y 295/35 en el trasero. Para la variante V10 plus, se incorporan frenos carboncerámicos.
Para mejorar la sensación y desempeño del deportivo de Ingolstadt se cuenta opcionalmente con la suspensión adaptativa Magnetic Ride.
Audi R8 es sin duda un deportivo representativo, el cual ha evolucionado de manera favorable tanto en diseño como en acabados, destacando su deportividad, sobre todo al lograr una velocidad tope de más de 200 millas por hora.